top of page
Leandro Crovetto

OJO MARICA

Actualizado: 1 dic 2020

Texto y Fotografias por Leandro Crovetto.


 

Me cuesta definirme, tanto como me cuesta hablar de mí. Escribo estas líneas como si estuviera pensando en voz alta, vomitando lo que se me viene a la cabeza acerca de la pregunta que creo nos invade a todos alguna vez en la vida ¿Quién soy? ¿Por qué hago lo que hago? ¿De dónde venimos? ¿Estamos solos en el universo?


Mi acercamiento a la fotografía viene de la mano con el mundo audiovisual al haber estudiado Diseño de Imagen y sonido en la FADU. Y no escribo esto a modo de currículum vitae, sino porque la universidad pública me abrió un mundo que, para mí, pibe de 18 años, recién salido de una escuela católica me era desconocido. Me refiero al mundo de la lucha social, la militancia, la historia de los pueblos eclipsada por la historia oficial que me contaron en la escuela.


El primer consejo que me dio mi viejo al entrar en la universidad fue: “No te metas en política”. Esas palabras me resuenan hasta hoy. ¿Cómo no meterme ante todo lo que se me estaba revelando? ¿Cómo no meterme cuando paralelamente estaba descubriéndome como sujeto político sexo-disidente?


Más tarde entendí en las palabras de mi viejo cómo la dictadura militar había operado en la cabeza de una generación.


Higui está procesada por defenderse de una patota que la atacó por no seguir la heteronorma. Al tratar de defenderse mató a uno de sus agresores. Hoy exigimos su absolución.



Pasaron marchas, asambleas, proyectos ficcionales y documentales y mi vínculo con la cámara fue mutando entre lo audiovisual y lo fotográfico.


“Los medios manipulan nuestras mentes, Ana” le dijo Augusto a su esposa mientras lo estaba entrevistando para un retrato documental acerca de su detención durante la dictadura. Otra frase que me resuena hasta hoy y me hace estar seguro que necesitamos multiplicar las miradas sobre los hechos. Que detrás de los medios hegemónicos hay negocios que la mayoría de las veces van en contra del bien de la población.


Es imposible ver mi relación con la fotografía despegada de mi ser marica. Porque mi ojo marica atraviesa cada una de mis fotos, cada uno de los temas que trato de visibilizar. Busca esas historias que por años fueron ocultadas, o contadas con una mirada hetero centrista, muchas veces burlándose de nosotras.


Hace tiempo que no necesitamos ser representadas por otros. De hecho, nunca lo necesitamos.


Marcha del orgullo TLGMBINB de La Matanza 2019



Saco fotos por el niño marica que fui y no encontró otra representación que la de Fabián Gianola y Miguel del Sel.


Saco fotos por las maricas, tortas y travas que luchan cada día. Por las excluidas, por las asesinadas por este sistema hetero-cis-patriarcal.


No se si una foto pueda cambiar el mundo. Pero se que una foto crea memoria y construye realidades. No podemos dejar eso en manos del poder, no podemos dejar que ellos nos silencien o nos estereotipen, porque esa es otra forma de matarnos.


Marcha del orgullo de diversidades y disidencias de San Martín 2019.

68 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

댓글


bottom of page